Una vez al año, la joya de Chiapas llega a Ciudad de México.
Más de 160 artesanos y artesanas traen el ámbar, resina fosilizada con cualidades de piedra preciosa que se obtiene de las minas de Simojovel.
Aquí puedes encontrar cosas originales, el ámbar original y a buen precio, porque en otros lugares luego te quieren vender y no es”, señaló Daniela, visitante.
Además del ornamento, color y tamaño, la calidad del ámbar se determina por su pureza: la cantidad de manchas, fracturas y organismos fosilizados en su interior.
Tiene inclusiones que son vegetales o animales o minerales, incluso. Entonces hay que revisarlas para ver si no vamos a cortar algún insecto importante”, explicó Antonio Ramírez, expositor.
Entre los tonos, se perciben rarezas: un tinte verde y el color que la artesana Maricarmen Hidalgo define como “lechoso”, una variedad inicialmente descartada por los mineros.
Para ellos era como que no servía, que estaba como que echado a perder, y ya cuando vieron que, al contrario, era un tipo de ámbar muy raro, se dieron cuenta de que tiene un plus, porque este ámbar únicamente se da en los países bálticos”, dijo Maricarmen Hidalgo, expositora.
“Expo Ámbar” estará hasta el 14 de diciembre en el Monumento a la Revolución.