Las manos de Cecilio Sánchez, artesano de Metepec, Estado de México, convierten el barro pigmentado en floridos árboles de la vida, trabajo premiado a nivel nacional y expuesto en la feria “Diálogos Artesanales” del Fonart.
Es un gusto para nosotros elaborar esto. A veces, aunque no hay ganancias, pues nosotros seguimos con esto porque pues es el amor que le tenemos nosotros a la artesanía y al barro en particular”, señaló Cecilio Sánchez, artesano.
Desde vírgenes hasta alebrijes, Cecilio Sánchez adorna cada escultura según el gusto de su comprador. Se basan en el árbol de la vida, emblema de Metepec y símbolo bíblico de la creación.
Lo que nosotros representamos es a Adán y Eva cuando cometieron el pecado original; entonces las bolitas que nosotros le ponemos al árbol de la vida representan las manzanas”, explicó Cecilio Sánchez.
En su taller de la colonia Providencia, en el Estado de México, labra un saber que ha recorrido Europa, heredado de abuelos diestros para obtener cazuelas de la masa de barro.
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