La película “Corazones jóvenes” se estrenó este fin de semana en México con una historia sobre el crecimiento emocional y afectivo de un grupo de adolescentes en Flandes, y ha generado diversas opiniones en redes sociales y salas de cine.
La cinta narra la vida de Elías, un adolescente que vive en Flandes, una comunidad donde todas las personas se conocen. Por presión social y familiar, “sale” con Valery. Sin embargo, la llegada de Alexander, recién mudado desde Bruselas, lo confronta con sus verdaderos sentimientos y el significado del amor.
Pese al mensaje de apertura e identidad que transmite, la distribuidora Cine Caníbal optó por cerrar los comentarios en sus redes sociales ante reacciones negativas hacia la película.
En contraste, durante una función a la que asistió el activista Guz Guevara, personas espectadoras compartieron sus impresiones positivas sobre el filme:
“Lo que es el amor sobre en todo en niños, porque son todavía niños y ya la apertura que existe acerca de este tema, a mí me pareció lo más lindo”, opinó Eugenia.
“Me encantó, creo que yo actuaría igual y ojalá mis nietos me tengan esa confianza”, comentó Griselda.
“En general siento que México es un país muy homofóbico y también hace falta generar un poco de conciencia en las familias para empatizar con los familiares que pertenecen a la comunidad LGTB…”, expresó Valeria.
Al cierre de la función, Guz Guevara subrayó la diferencia entre la reacción en redes y la vivencia presencial:
“La realidad es otra, esto que nos rodea. Entonces yo creo que en lugar de hacer el juego a las redes, estar chocando, estar discutiendo y estar debatiendo, es más importante apelar a lo que nos hace sentir el arte y en este caso la película transmite mucho y ojalá llegue a muchos lugares y haga resonar a muchos corazones y muchas mentes.”
La película ya se exhibe en cines de distintas ciudades del país. Como complemento, se sugiere al público interesado en temáticas similares ver también “Close” y “Monstruo”, cintas que abordan la niñez, el afecto y la construcción de identidad.
Como se dice en uno de los diálogos de “Corazones jóvenes”, en voz del abuelo de Elías: “Hay que disfrutar lo que sentimos y no juzgar”.