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Subastan en París piezas prehispánicas pese a protestas de México

No hubo manera de frenar la subasta de piezas arqueológicas en la Casa Christies, de París.

 

Sin miramientos se realizó la puja de la colección “Quetzalcóatl: serpiente emplumada” y en una hora recaudaron casi 62 millones de pesos con la venta de 35 de los 39 lotes de piezas precolombinas latinoamericanas que se ofertaban.

 

Haciendo oídos sordos a las demandas del Gobierno de México para detener la subasta y permitir que el Instituto Nacional de Antropología e Historia y la Secretaría de Relaciones Exteriores revisaran el origen de las piezas, Christies siguió adelante.

 

La diosa Cihuateotl, anunciada como una de las piezas estrella de la subasta, se remató por más de 12 millones de pesos.

 

El pasado 29 de enero, las autoridades mexicanas interpusieron una demanda legal para proteger al patrimonio cultural de nuestro país.

 

La secretaria de Cultura, Alejandra Frausto manifestó su frustración al respecto.

 

Este tráfico de bienes culturales no es una cosa novedosa, lo que es novedoso es dar batalla porque ahora la legislación nos permite realizar este tipo de exhortos, lo que es muy hostil en la legislación francesa, que quiere decir, que para ellos la carga de la prueba es en la posesión”.

 

Sin registro propio de las piezas, la Secretaría de Cultura, a través del INAH dictaminó los lotes presentados por la Casa Christies y no solo determinó que son piezas arqueológicas de gran valor patrimonial, sino que además algunas de las piezas que anunciaron piezas son evidentemente falsas como la máscara Xochipala, vendida en más de un millón de pesos y la supuesta máscara Teotihuacana, adquirida por más de ocho millones de pesos.

 

Frausto aseguró que la indignación se transformará en un plan de colaboración adecuado para que estos casos no se repitan.

 

Vamos a seguir trabajando de la mano de la diplomacia para lograr mejores resultados internacionales que nos permitan recuperar el patrimonio, parte de nuestra identidad, parte de nuestra historia, parte muy importante de nosotros y no lo consideremos en ningún momento motivo de comercio”, puntualizó la secretaria de Cultura.

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