El torneo de Roland Garros, que se iba a celebrar del 23 de mayo al 6 de junio, fue retrasado una semana debido a la pandemia del coronavirus, con la esperanza de poder recibir público en las gradas, anunció este jueves la Federación Francesa de Tenis (FFT).
Los partidos se disputarán del 30 de mayo al 13 de junio, tras las calificaciones, que se celebrarán entre el 24 y 28 de mayo. Este margen de una semana permitirá que las restricciones en vigor en Francia por un recrudecimiento de los contagios por COVID-19 se flexibilicen.
El objetivo es “maximizar las posibilidades de que el torneo pueda jugarse ante el mayor número de espectadores posible, pensando tanto en los jugadores y jugadoras, como en la comunidad de aficionados, y garantizando la seguridad sanitaria de todos”, dijo la FFT en un comunicado.
Teniendo en mente este doble objetivo, esta semana puede resultar preciosa”, insistió la Federación.
La edición 2020 del torneo fue retrasada de mayo a septiembre.
En esta ocasión, el retraso de una semana tendrá un impacto muy limitado en el calendario de competiciones, aunque solo habrá dos semanas entre la final de Roland Garros y el inicio de Wimbledon (28 de junio-11 de julio).
La decisión de retrasar una semana el torneo francés contó con el visto bueno del Grand Slam Board, la instancia que reúne a los cuatro grandes torneos del Gran Slam.