En la historia reciente de las ligas mayores, varios son los casos de jugadores que han sido acusados de violencia de género.
En 2018 el venezolano, Danry Vásquez, jugaba en Triple A y se difundió un video en redes, donde se observa cómo golpea a su novia. El jugador fue suspendido y actualmente juega en la Liga de Venezuela.
En las grandes ligas, también ese año, el pitcher mexicano, Roberto Osuna, fue arrestado por agresión a su pareja en Canadá cuando jugaba para los azulejos de Toronto. Fue suspendido 75 partidos, por lo que estuvo inactivo dos meses. Actualmente juega en la liga de Japón.
El pelotero Mike Clevinger, pitcher de los Medias Blancas de Chicago, fue investigado por la MLB luego de que su expareja lo acusó de abuso físico y verbal a su hija.
El exlanzador de los Medias Rojas de Boston, Steven Wrigh, fue detenido en Tennessee por dos cargos: uno de agresión y otro por evitar que su esposa, la víctima, llamara a emergencias.
A estos casos se suman el del exjardinero de los Dodgers, Yasiel Puig, quien agredió a su hermana. El exyankee, Aroldis Chapman que retuvo a su novia por el cuello y el exrelevista de los Mets de Nueva York, Jeurys Familia, por agresión física a su pareja.