Qatar 2022, justa deportiva esperada por aficiones que se cuentan por millones en todo el mundo, iniciará este 20 de noviembre y culminará el 18 de diciembre.
El encuentro futbolístico está manchado por sobornos, fraudes y lavado de dinero, por lo que Qatar ha sido llamado el Mundial de la corrupción.
Fue el 2 de diciembre de 2010 cuando la FIFA, comandada por Joseph Blatter, designó a Qatar como sede para albergar la máxima fiesta del fútbol este 2022.
La asignación de Qatar sorprendió a todo el planeta. Este país se convertirá en el primero de Medio Oriente en realizar una Copa del Mundo.
¿Compra de votos para elegir a Qatar?
Aficiones y expertos comenzaron a cuestionar, ¿cómo es posible que un país con un clima de altas temperaturas, poca infraestructura deportiva, y una cultura mínima por el fútbol le ganara a países como Estados Unidos, Corea del Sur, Australia o Japón?.
¿cómo Qatar consiguió 22 votos a favor del Comité Ejecutivo de la FIFA para ser el anfitrión?, ¿cómo esta nación árabe fue elegida frente a los estadounidenses que eran los favoritos?
El reinado de Joseph Blatter, quien era presidente de FIFA, comenzó a derrumbarse en 2010, tras la designación de Qatar como sede del mundial.
La prensa comenzó a jalar la madeja de la corrupción, la FIFA inició una investigación interna.
De esta forma se descubrió lo que sería llamado el Qatargate, un capítulo del famoso FIFAgate, el mayor escándalo de corrupción en el mundo del futbol.
El inicio del trato millonario
Todo comenzó cuando la revista France Football reveló que el 23 de noviembre de 2010 (nueve días antes de la votación) durante un almuerzo secreto en el Palacio de Eliseo, algunos organizadores del Comité Ejecutivo de la FIFA se reunieron para garantizar la compra de votos en favor de Qatar como sede mundialista, además de los temas de la compra del París Saint-Germain por parte de empresarios qataries y la creación de una cadena deportiva.
Entre los que estuvieron reunidos se encontraban Platini, el entonces presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, el jeque árabe Tamim Bin Hamad Al Thani, actual emir de Qatar, y su entonces primer ministro de exteriores, Hamad Ben Jassem.
Este último fue el encargado de terminar de cerrar el trato millonario por 3.7 millones euros, divididos en transferencias para los miembros del Comité Ejecutivo que estuvieron en esta reunión.
Investigaciones y detenciones
Luego de cinco años de investigaciones, en mayo de 2015, comenzaron las detenciones por parte de la justicia estadounidense contra algunos dirigentes que formaban parte del Comité Ejecutivo, acusados de fraude electrónico, blanqueo de dinero y extorsión en varias justas deportivas, entre ellas Qatar.
Sorprendentemente, a Blatter y Platini, no se les fincaron cargos. ¿El argumento?, falta de pruebas.
No obstante, en las investigaciones se detectó un pago de aproximadamente 2 millones de dólares, hecho por Blatter a Platini en 2011. Se cree que la jugosa cantidad en realidad se trataba del pago por el voto a favor de Qatar, aunque ambos aseguraron que se trató de un trabajo de asesoría entre 1999 y 2002.
Por la injustificada transferencia millonaria recibieron una suspensión de ocho años de cualquier actividad relacionada con el fútbol, la cual fue reducida a 48 meses para Platini.
Al final fueron absueltos en julio pasado, cuatro meses antes de dar inicio a la Copa del Mundo.
Aunque hubo cientos de pruebas que mostraron el lodazal de la corrupción, las autoridades qataríes siempre rechazaron las acusaciones.
Qatar está listo para la fiesta mundialista, misma que pasará a la historia por destapar el mayor fraude y escándalo de corrupción en la FIFA y el fútbol mundial.
