El ruso Daniil Medvedev, tercer cabeza de serie, conquistó este domingo su primer torneo sobre tierra batida al imponerse en la final del Masters 1000 de Roma al danés Holger Rune (N.7 del mundo) 7-5, 7-5.
Medvedev, en cuyo título en la ‘ciudad eterna’ pocos confiaban -después de que iniciase su recorrido sin haber ganado un solo partido en sus tres participaciones precedentes- conquistó el vigésimo título de su carrera, 18 de los cuales fueron logrados sobre superficie dura y uno sobre hierba.
Con este título, el ruso se convertirá el lunes en el tenista número 2 del mundo, por delante de Novak Djokovic, en una clasificación que estará dominada por el español Carlos Alcaraz, lo que tendrá su importancia para los cuadros de Roland Garros, que da inicio en una semana.
En la segunda final de su carrera sobre tierra batida, después de la perdida en Barcelona en 2019, Medvedev, de 27 años, dio una lección a su joven rival de 20 años, verdugo de Djokovic en cuartos de final.
“Odiaba la tierra batida, ahora es seguro que me gusta un poco más”, bromeó el ruso, que siempre había perdido en su primer partido en sus tres participaciones previas en Roma, en 2018, 2019 y 2021.