El emblemático barrio de Xochimilco, en la capital mexicana, tuvo una gran representante en la justa olímpica, Esmeralda Falcón.
Los inicios de Esmeralda en este deporte llegaron sin imaginarlo. Desde pequeña, quiso practicar kun fu, pero el camino la llevó al boxeo. sus inicios no fueron fáciles y sufrió discriminación por su condición de mujer.
Los primeros si me dijeron que ellos no entrenaban mujeres, otros yo sentía que no visualizaban un futuro deportivo con una mujer y de ahí empezó el decir, esto es un reto y yo quiero llegar a los más alto y demostrar que nosotras las mujeres si podemos”, Esmeralda Falcón.
Ser mujer no fue el único obstáculo. también peleó contra el rival más fuerte que ha tenido, el asma. enfermedad que la enfrentó al bullying desde la infancia.
No tenemos conocimiento de cómo se le debe tratar a un niño con asma, entonces actúas normal y hay veces que te hacen burla, tú no puedes jugar porque te cansas, en lugar de que te apoyen y te integren son crueles y te excluyen”, añadió.
Luego de varios tratamientos y métodos de fortalecimiento sus primeras peleas fueron en exhibiciones en ferias, hasta que llegó la oportunidad de un torneo, donde demostró su gran nivel boxístico.
A pesar de su temor a la sangre y los golpes, esmeralda se ha consolidado como una de las mejores boxeadoras colocándose en el top 20 mundial. entre su palmarés más importante se encuentran la medalla de oro de los juegos centroamericanos y del caribe de barranquilla 2018 y el bronce en los panamericanos de lima 2019.
Guerrera, pero también una mujer muy sensible, esmeralda falcón, en Tokio dio lo mejor de sí, y aunque fue eliminada en la primera ronda, vivió por primera vez su sueño olímpico y sin duda abrió la puerta a muchas boxeadoras mexicanas.