El Estadio Azteca se convertirá en toda una leyenda, pues será el primero en inaugurar tres Copas del Mundo, la de 1970, 1986 y 2026, pero además, sumará un récord de 24 encuentros mundialistas en total cuando sea sede dentro de dos años.
De esta forma, el Azteca afianza su posición en la cima de las canchas mundialistas, listado en el que le seguirán de lejos el Estadio Maracaná (Brasil) con 15 partidos, y el Estadio Jalisco (Guadalajara) con 14 encuentros en Copa del Mundo.
El Mundial de 2026 arrancará en el legendario Estadio Azteca, emblemática cancha de Ciudad de México cuya capacidad actual es de unos 83 mil espectadores.
México será sede de 13 partidos en total durante la Copa Mundial de la FIFA. El Estadio Azteca albergará cinco encuentros, incluyendo el partido inaugural del Mundial el 11 de junio de 2026; el Estadio Akron (Guadalajara) recibirá cuatro partidos, al igual que el Estadio BBVA (Monterrey).
La ‘Mano de Dios’
Los arquitectos Pedro Ramírez Vázquez y Rafael Mijares Alcérreca fueron los responsables de diseñar el estadio más grande de México, caracterizado por su techo volado y reconocido por consagrar al ‘Rey’ Pelé y también a Diego Armando Maradona en los mundiales de 1970 y 1986 respectivamente.
Edson Arantes do Nascimento, mejor conocido como Pelé, llegó a la cumbre de su fructífera carrera en México 70, donde levantó la Copa del Mundo ante los ojos del mundo entero, pues fue el primer torneo que se transmitió a color a nivel internacional, y eso le dio más popularidad.
Para esa justa mundialista Pelé llegó con 29 años y como una de las máximas figuras del futbol junto a Gerd Müller, Bobby Moore y Franz Beckenbauer.
Asimismo, el Azteca tiene un capítulo reservado los cuartos de final de la edición de 1986 entre Argentina e Inglaterra, cuando Diego Maradona anotó un gol con la mano, bautizado como “la Mano de Dios“, y en ese mismo encuentro también el Estadio Azteca fue testigo del llamado “Gol del Siglo”.
Maradona y Pelé recogieron sobre el césped del Azteca el trofeo de aquellos Mundiales.
El Estadio Azteca ha sido testigo también del logro más importante de la Selección Mexicana de Futbol, en su categoría mayor, cuando en 1999 logró coronarse en la Copa Confederaciones en una final memorable ante Brasil, a quien venció 4 goles por 3 en tiempo regular.