Procedentes de Tokio, con sonrisa en el rostro y medalla al cuello, comenzaron a llegar a Ciudad de México los primeros atletas paralímpicos, tras cerrar orgullosamente su participación en la justa de Tokio.
Amalia Pérez, medalla de oro en powerlifting, fue recibida por sus familiares, y dijo estar feliz, ya que sus sextos juegos paralímpicos fueron un éxito.
La verdad significa mucho, la sexta medalla paralímpica de mi carrera, de mi historia; sí venía todo por el todo, sabía que iba a ser una contienda muy difícil más a estas alturas en Tokio, no dejo de ser exigente a pesar de la pandemia, sin embargo, creo que el sueño, el espíritu, el trabajo, la garra, las ganas de hacer lo mejor de mí, se dio la oportunidad”, Amalia Pérez, parapowerlifting.
La judoca y medallista de bronce Lenia Ruvalcaba, se dijo agradecida y emocionada por colgarse su tercera medalla paralímpica, a pesar de que su participación estuvo en duda debido al COVID-19.
Me infecté de COVID tres semanas antes de viajar a Japón, llegué a Japón, di positivo por COVID, afortunadamente la segunda prueba di negativo, entonces les digo que estos juegos de verdad fueron los más sufridos no solo para mí”, Lenia Ruvalcaba, judoca.
Simplemente agradecida y emocionada porque pude llegar a tener este resultado después de lo que pasó, para mi esta medalla me sabe a oro definitivamente”,
Mientras que el judoca Eduardo Ávila, que también obtuvo el bronce, se quedó con las ganas de poder disputar la final y subir a lo más alto del podio.
Me siento satisfecho, pero tengo ahí una espinita de no haber llegado a la final, al perder la semifinal me mandaron a repechaje por el bronce, me hubiera gustado traer algo más, pero no le hago el feo a mi medalla”.