Es más que el mejor tirador de la historia. Es más que el mejor jugador de la actualidad. Stephen Curry, jugador de Golden State Warriors, es una atracción en sí misma.
Por eso el martes por la noche, en el mítico Madison Square Garden, se convirtió en el máximo triplero de la historia, en todas las instancias, Playoffs, fase regular, finales.
Las entradas fueron las más caras de la historia de la fase regular, trepando los tickets más baratos a 500 dólares en la reventa, 450% más de lo que cuestan en un partido normal, y llegando a 4 mil la más cara.
Stephen Curry
Curry necesitó 511 partidos menos que Ray Allen para quitarle el récord de 2 mil 973 triples.
Sus números devastadores, reflejan cómo cambió el básquet, superando prejuicios y lesiones, con bravísimas rutinas, utilización de tecnología de punta y neurociencia.
Su gran mentalidad, ambición y personalidad que lo han convertido en una atracción.
Y él respondió, como siempre hace. Clavó cinco bombas y superó los 2 mil 973 triples de Ray Allen, el líder hasta ayer, quien estuvo en la cancha y se dio un emotivo abrazo con quien rompió su récord.