La Agencia Internacional de Energía (AIE) revisó a la baja la demanda mundial de petróleo a raíz de los confinamientos en China, y se mostró confiada en el equilibrio del mercado a pesar de la guerra en Ucrania, en su informe mensual publicado este miércoles.
“Las nuevas medidas restrictivas de confinamientos a raíz de casos de COVID-19 en China provocaron una revisión a la baja de nuestras expectativas de demanda global de petróleo en el segundo trimestre de 2022 y para el conjunto del año”, indicó la AIE.
Como consecuencia de esto, la agencia indica que recortó su estimación de demanda mundial en 260 mil barriles diarios (b/d) con respecto a su anterior informe mensual, y apuesta ahora a un consumo de 99.4 millones de barriles diarios en 2022, es decir en alza de 1.9 mb/d con respecto a 2021.
En China, a raíz del resurgimiento de casos de COVID-19, se impusieron confinamientos muy estrictos por ejemplo en la región de Shanghái, que castigan con dureza la actividad económica.
Del lado de Rusia -el exportador mundial más grande y que invadió Ucrania el 24 de febrero-, su producción caería una media de 1,5 mb/d en abril, luego a cerca de 3 mb/d en mayo a raíz de las sanciones internacionales,, estima la AIE.
“Mientras que algunos compradores, más particularmente en Asia, aumentan sus compras de barriles rusos a precios muy reducidos, los clientes tradicionales recortan sus compras”, según el informe.
Pero “a pesar de las perturbaciones en Rusia”, la AIE estima que “la baja esperada de la demanda, los aumentos regulares de producción de parte de los miembros de la OPEP+, así como por parte de Estados Unidos y otros países no miembros de la OPEP+, y el hecho de que los países miembros de la AIE recurrirán masivamente a sus reservas, debería evitar que se produzca un fuerte déficit” y deberían lograr equilibrar el mercado.