Como parte de su plan de rediseño, Altán Redes inició el proceso para reorganizar con mayor agilidad sus compromisos financieros, lo que le permitirá garantizar la operación de su red y los servicios de telecomunicaciones a clientes y usuarios finales.
Ante los retos actuales a nivel global, Altán Redes, como otras empresas y como muchas iniciativas de infraestructura de esta magnitud, está en proceso para mejorar las condiciones financieras de la compañía.
En este sentido, la empresa se encuentra en negociaciones positivas con la mayoría de los acreedores para preservar el valor de la compañía, salvaguardar los activos, su operación y los empleos de sus colaboradores, en beneficio de todos sus grupos de interés.
De esta manera, solicitó iniciar un concurso mercantil, mecanismo con el cual continuará con el despliegue de su red y la operación del proyecto de telecomunicaciones de mayor relevancia en la historia del país, y que permitirá cerrar la brecha digital.
“Contamos con el respaldo de nuestros accionistas y del Gobierno de México en este proceso, además de la confianza de nuestros clientes que siguen sumándose a Altán”, afirmó Salvador Álvarez, CEO de Altán Redes.
El modelo de negocio de Altán es exitoso y hemos logrado consolidar nuestra posición en el mercado como la oferta comercial de conectividad más competitiva soportada en tecnología 4.5G LTE. Nuestros 100 clientes, que hoy atienden a más de 3 millones de usuarios finales, son muestra de ello”, agregó.
Altán Redes, encargada de desplegar y operar La Red Compartida, nace de un proyecto único en el mundo, a través de una Asociación Público-Privada por mandato del Gobierno federal, para transformar las telecomunicaciones en México, con el objetivo de cerrar la brecha digital y fomentar la competitividad, permitiendo la entrada a nuevos operadores y el acceso a servicios de telefonía móvil e internet de alta velocidad al mejor precio.