Con un vehículo como éste, Abel, Pedro y muchos habitantes de la frontera norte del país han dado sustento a su familia por décadas.
Son los llamados autos “chocolate”.
¿Qué significa esa camioneta para usted? pues es el sostén de mi familia. O sea, mucho. De aquí sacamos para comer y para pagarnos todos nuestros gastos”, Abel Cisneros, comerciante de frutas y verduras.
Sí. Tener una trokita porque en eso nos movemos a trabajar. Llevamos el material o todo lo que se ocupa”, Pedro González, constructor
Baja California, con una población de 3.7 millones de habitantes, es el estado que concentra la mayor cantidad de estas unidades con casi el 40% del parque vehicular.
Se calcula que tan sólo en Baja California hay entre 500 mil y 600 mil autos “chocolate”. Vehículos de este tipo son literalmente el motor económico de miles de familias al norte del país.
Muchos de estos vehículos los compran en remates en Estados Unidos. Los vehículos que salen del remate, salen sin placas entonces le ponen placas, ingresan a México y aquí le dejan placas sobrepuestas o simplemente les quitan las placas, ¿no? Mario Jesús Escobedo Carignan, Secretario de Economía Sustentable y Turismo, Baja California.
Durante muchos años han entrado al país desde Estados Unidos.
Sus placas tienen la leyenda “California”, pero no cuentan con permiso para circular, no pasaron por el proceso de importación. Otros portan engomados sin validez oficial otorgados por asociaciones locales, sin fundamento legal.
Su principal característica es que son atractivos por los bajos precios.
Los propietarios de estos vehículos son detenidos constantemente por agentes municipales; por ejemplo, en Tijuana, donde les llegan a pedir “mordidas” de a 100 y hasta 500 pesos para dejarlos ir. De lo contrario, van al corralón.
Cuánto le piden cada que lo detienen. No, pues son 100, 200 pesos”, Luis Tomás, fletero.
Por recuperarlo me pedían 17 mil pesos. Casi mejor lo que hice, porque tenía que pagar grúa, el impuesto, el piso, y luego el guardia entonces por eso ya decidí mejor que pues perdiera mi carrito”, Mario César Gávez, albañil y plomero.
El peor problema es que muchos “chocolates” son usados para cometer delitos.
Sólo en Baja California, en 2020 fueron asegurados 380 unidades usadas en homicidios calificados. El 78% eran chocolates, de acuerdo a datos oficiales.
Para poner fin a esta grave situación, el Gobierno de México publicó el acuerdo para regularizar vehículos usados de procedencia extranjera o acuerdo de importación definitiva de autos usados.
Abarcará los seis estados fronterizos: Baja California, Sonora, Chihuahua, Nuevo León, Tamaulipas; y además Baja California Sur.
El objetivo lo explicó a ONCE NOTICIAS, el secretario de Turismo de Baja California, Mario Escobedo.
Éste programa va dirigido a a los vehículos que ya están en Baja California. No los que van a entrar, a los que ya están ya están aquí. Se emiten placas de frontera” Mario Jesús Escobedo Carignan, secretario de Economía Sustentable y Turismo, Baja California
Aunque las reglas de operación están en proceso, se ha anunciado que el costo por regularizar un coche sea de 2 mil 500 pesos.
El monto recaudado se usará para obras de infraestructura vial.
No, esta no es una medida recaudatoria, de ninguna manera. Es una medida que atiende más bien una demanda de los estados fronterizos por un tema de seguridad pública. ¿por qué? Porque en el norte en toda la zona fronteriza mucho de la delincuencia organizada se mueve en este tipo de vehículos”, Buenrostro Sánchez, jefa del Servicio de Administración Tributaria.
No hay una cifra exacta, pero se estima que en toda la región fronteriza hay 3 millones de autos chocolate en circulación.
En la próxima entrega, la industria automotriz se opone a esta regularización por el impacto que tendría en la venta de coches nuevos.