La Comisión Federal de Competencia Económica determinó, de manera preliminar, la falta de condiciones de competencia efectiva en algunas partes de la cadena de valor de combustible para aeronaves, o turbosinas, tras una investigación hace más de dos años.
Las pesquisas de la Autoridad Investigadora de Cofece, como se conoce también al organismo responsable de combatir a los monopolios , arrojaron altas concentraciones en los mercados de comercialización primaria, almacenamiento externo, comercialización secundaria, almacenamiento interno y expendio, con pocos participantes y capacidad para restringir el abasto o fijar precios.
“La turbosina es el principal insumo para el transporte aéreo, ya que representa entre 25 y 30% de los gastos operativos de las aerolíneas, según reportes a la Bolsa Mexicana de Valores”, dijo la Comisión, en su reporte preliminar. “Por ello, es importante que existan condiciones para favorecer este medio de transporte para el traslado de pasajeros y mercancías”.
En concreto, las autoridades identificaron a la estatal Pemex Transformación Industrial, o Pemex Tri, como agente dominante en el mercado de comercialización primaria, con una participación de 98%; mientras que en almacenamiento externo el principal competidor es Pemex Logística.
Para comercialización secundaria, Aeropuertos y Servicios Auxiliares, o ASA, y la privada Worldwide Fuel Services controlan en conjunto 93% del mercado; en tanto que para almacenamiento interno y expendio, ASA es el único prestador del servicio en algunos aeropuertos del país.
Cofece también detectó la existencia de barreras a la competencia por parte de algunas dependencias, como la Secretaría de Energía, que solicita requisitos injustificados para la obtención de permisos de importación de turbosina; o el incumplimiento de la separación funcional de actividades de ASA, ordenada previamente por la Comisión Reguladora de Energía.