El Producto Interno Bruto (PIB) del Reino Unido se recuperó con fuerza un 15,5% en el tercer trimestre gracias a la reapertura de la economía, pero se debilitó en septiembre lo que augura un final de año difícil a raíz del confinamiento.
A pesar de esta recuperación durante el verano, la actividad no alcanzó su nivel anterior a la pandemia, tras una caída histórica del PIB de 19,8% en el segundo trimestre, según cifras publicadas este jueves por la Oficina Nacional de Estadísticas británica (ONS).
El PIB se mantiene 9,7% por debajo de su nivel de finales de 2019.
En el tercer trimestre, la economía aprovechó el fuerte rebote del consumo interno y las inversiones de las empresas, que estuvieron congeladas un buena parte de la primavera.
En cambio, el mes de septiembre muestra señales de desaceleración del crecimiento, que sólo subió 1,1% en comparación intermensual.