El Gobierno de México hizo un llamado a la acción para impulsar una agricultura para la paz.
Las secretarías de Relaciones Exteriores y Agricultura advirtieron que la desaceleración de la actividad económica de la pandemia y el incremento de la pobreza podrían significar el surgimiento de graves crisis alimentarias.
Un posible deterioro en la seguridad alimentaria mundial puede contribuir en la incidencia de conflictos mundiales y crisis sanitarias y por esto se requieren movilizar recursos económico y capacidades de atención y transferencia de tecnología para facilitar acciones que promuevan una transformación de los sistemas agroalimentarios mundiales’’, aseguró Martha Delgado, subsecretaria de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la SRE.
Al conmemorar el 50 aniversario de la entrega del Premio Nobel de la Paz a Normand Borlaug, reconocido por salvar del hambre a 2 millones de personas, la cancillería y la Sader convocaron a diversos organismos internacionales para exponer que la agricultura es el principio de la paz.
Donde hay escasez de alimentos, y se explotan agotan los recursos para la producción de alimentos nutritivos, estallan los conflictos y surgen problemas sociales como desempleo, inseguridad y migración forzada que amenazan el futuro y la seguridad alimentaria de millones de personas’’, afirmó Víctor Manuel Arámbula Villalobos, secretario de Agricultura y Desarrollo Rural.