El furor de la apertura económica en Cuba ha contagiado incluso a celebridades deportivas, como Javier Sotomayor, el histórico campeón mundial en salto de altura, quien ya abrió un restaurante en La Habana.
Cuba poco a poco, en este sentido de las medianas, micro y pequeñas empresas, no es que estemos dando de momentos pasos agigantados más que todo por la situación actual en que nos encontramos, pero si, que poco a poco creo que vamos a tener muchísimas más oportunidades”, dijo Javier Sotomayor, campeón mundial en salto de altura.
Inmersa en un proceso de modernización que inició apenas hace cuatro meses, por primera vez en medio siglo, la isla se abre a pasos acelerados a la operación de negocios privados.
Suman casi dos mil autorizaciones de empresas micro, pequeñas y medianas, con las 162 avaladas este jueves por el Ministerio de Economía y Planificación. La abrumadora mayoría, mil 900, corresponden al régimen privado, apenas 47 estatales y 27 cooperativas.
Las solicitudes van desde restaurantes y centros de reparación de electrodomésticos hasta fábricas de equipo, muebles y bienes de consumo.
Todas con menos de cien empleados, uno de los requisitos base.
El Gobierno cubano también avaló la operación de siete empresas de comercio exterior de gestión no estatal, con lo que ya suman 49 las firmas autorizadas para importar y exportar bienes.
“Ha costado un poco de trabajo, pero lo hemos logrado. Ya estamos exportando nuestro producto, estamos importando materias primas para las producciones nuestras”, mencionó Luis Betancourt, dueño de Mueblería Dforja.
Las reformas pretenden detonar el crecimiento y legalizar la actividad informal.
El 57% de estos negocios ya operaba, pero en otras condiciones.