El precio del crudo avanza por la debilidad del dólar, un declive en los inventarios petroleros en Estados Unidos y la aprobación de otra vacuna contra el coronavirus en Reino Unido, aunque ambos contratos referenciales se encaminan a cerrar el año con una pérdida cercana al 20%.
A las 1023 GMT, los futuros del crudo Brent ganaban 39 centavos, o un 0,76%, a 51,48 dólares el barril, tras haber comenzado el año por encima de los 66 dólares.
Por su parte, el West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) sumaba 36 centavos, o un 0,75%, a 48,36 dólares, frente a los cerca de 62 dólares de principios de 2020.
La continua preocupación por las restricciones relacionadas con el coronavirus, que afectan a la demanda de combustible, era contrarrestada por algunos factores alcistas.
El dólar tocó su mínimo desde 2018 frente a una cesta de seis destacadas monedas, abaratando el crudo a los tenedores de otras divisas.
Asimismo, las esperanzas de normalización de los viajes y el trabajo recibieron un impulso después de que Reino Unido se convirtió en el primer país que aprueba la vacuna contra el coronavirus desarrollada por la Universidad de Oxford y AstraZeneca.
Las acciones asiáticas tocaron un récord máximo por apuestas de los inversores de una fuerte recuperación económica el año próximo, en medio de pocas señales de que las autoridades vayan a desmontar las masivas iniciativas de estímulo y en un momento en que Estados Unidos está cerca de acordar un nuevo paquete de alivio para sus ciudadanos.