La Organización de las Naciones Unidas y su Programa para el Medio Ambiente reconocen como energías limpias a la hidroeléctrica, eólica, solar, geotérmica y bioenergética, sin embargo, la Reforma Energética de 2013 en México decidió no reconocerla. De acuerdo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), dicha reforma, que actualmente se encuentra vigente, sólo reconoce a la solar y eólica como energías limpias, por lo que obliga a la CFE a comprar energías a los privados para cumplir con su cuota de generación de energías limpias.
“Por decreto, la reforma energética, con la derogación de la Ley del Servicio Público de Electricidad y la aprobación de la Ley de la Industria Eléctrica, otorgó el beneficio de los Certificados de Energía Limpia sólo a la energía solar y eólica”, afirma la CFE.Incluso, la propia Ley de la Industria Eléctrica reconoce como energías limpias a la hidroeléctrica, geotermia y nuclear, además de la solar y eólica, sin embargo, son los lineamientos que establecen los criterios para el otorgamiento de Certificados de Energías Limpias (CELs) y los requisitos para su adquisición discriminan otorgar estos CELs a todas las fuentes de energías limpias instaladas en el País, previo a dicha Reforma. De acuerdo con la ONU, las fuentes variables de energía renovable plantean diferentes cuestiones en relación con el sistema de suministro eléctrico, si bien el principio es el mismo, se necesitará una combinación de tecnologías instaladas en una amplia gama de ubicaciones para satisfacer una demanda que varía a diario.
“La energía hidroeléctrica, la producción de energía a partir de biomasa, la energía geotérmica y la energía solar de concentración con almacenamiento de energía térmica son tecnologías con carga de base o disponible, y no plantean problemas especiales para el funcionamiento de la red eléctrica”, señala la ONU.Así, la CFE genera energía con el uso de distintas fuentes como las antes mencionadas y reconocidas incluso por organismos internacionales como la ONU. De acuerdo con la propia CFE, en el año 2020 la Comisión generó 40 TeraWatts Hora con plantas hidroeléctricas, geotérmicas y nuclear, significando 20% del total de energía generada en el país.
“Sin embargo, CFE ha sido obligado, para cumplir con su porcentaje de generación de energía limpia, a comprar estos certificados a empresas privadas”.“CFE pierde por todos lados pues no se reconoce su energía como limpia; se le exige cumplir con el requisito de energía limpia, comprando a los privados; los CELs se convierten en una obligación de la CFE para anclar las inversiones a pesar de que la propia CFE genera con energías limpias, además de que los privados podrían bursatilizar estos certificados, buscando como cualquier otro papel que juega en la bolsa de valores, obtener ganancias especulativas”, asevera la Comisión Federal de Electricidad.