Lejos de voces sin fundamento, la economía mexicana no está estancada, aseguró Gabriel Casillas, economista en jefe para Latinoamérica del Banco Barclays. Lo que se necesita en estos tiempos, subrayó, es acelerar el crecimiento y aprovechar las oportunidades que se nos presentan.
“Yo no veo estancamiento, lo que si veo es una necesidad de acelerar el crecimiento”, dijo Gabriel Casillas Olvera, economista en Jefe para Latinoamérica del banco Barclays.
En charla con Once Noticias, el analista consideró oportuno el programa de créditos a PYMES, que la Banca Comercial y Hacienda pondrán en marcha en cuatro semanas.
“Qué bueno que se hagan ese tipo de cosas, porque efectivamente en las PYMES, generan empleos, estas personas tienen empleos, consumen, también se hace la famosa economía circular”, agregó Casillas.
En tiempos en que las tasas de interés han ido en aumento en siete ocasiones consecutivas, para controlar la inflación, pareciera contradictorio, dijo el experto, que los pequeños y medianos negocios se animen a endeudarse a niveles más elevados.
Pero esta apreciación no es correcta. Las PYMES generan 2 de cada tres empleos en el país y mueven toda la economía doméstica.
“Claro que es un buen momento de ayudar a las PYMES con créditos, ya sea que se los otorguen, en lugar de que reciban una negativa o que se les otorgue con una tasa un poco más baja. Yo creo que es un gran momento y lo que estamos esperando de las autoridades es ver cómo lo van a instrumentar, porque va a haber créditos para PYMES ¿Quién se lo va a dar? Va ser vía la banca ¿Qué va a pasar, va haber garantías?”, añadió.
Este respaldo crediticio, precisó, debe estar acompañado de reglas de operación que beneficien a bancos y PYMES.
“Entonces esta parte de las tasas preferenciales normalmente el Gobierno ayuda con este medio de garantías, porque a un banco, a veces, le es difícil discriminar si te van a pagar o no”, puntualizó Casillas.
Ahora, enfatizó Casillas, lo importante es alentar por dos frentes la reactivación económica; con mayor empleo y consumo, así como reducir la inflación.
Subrayó incluso que las tasas de interés primarias, en 6.5%, no dañarán a los pequeños y medianos ahorradores e inversionistas. Sino solo a los grandes capitales.