Empresarios de américa del norte exhortaron a los gobiernos de México, Estados Unidos y Canadá a cumplir cabalmente con lo establecido en el T-MEC para garantizar un mayor crecimiento económico. Previo a la Cumbre de Jefes de Estado en Washington, la iniciativa privada reconoció que el comercio y la inversión entre los tres países ha contribuido a la generación de al menos 20 millones de empleos en Norteamérica; sin embargo, puntualizaron que aún queda mucho por hacer en materia de competitividad. Además, alertaron que el deterioro en la inversión, en cualquiera de los tres países, daña la economía, la seguridad y el potencial de crecimiento de Norteamérica. Asimismo, dijeron que esto afectaría la capacidad del T-MEC como instrumento de certidumbre legal. También expresaron la preocupación de inversionistas de Estados Unidos y Canadá por los esfuerzos del Gobierno de México por reducir la competencia privada en el sector energético para favorecer a empresas del Estado en detrimento de proveedores de energías renovables. Además, expusieron las inquietudes del empresariado canadiense y mexicano por las interpretaciones divergentes sobre las reglas de origen del sector automotriz del T-MEC, por parte de Estados Unidos, lo que representa riesgos para las cadenas integradas de suministro. El sector privado trilateral ratificó su firme compromiso para alcanzar una visión compartida de una América del Norte más competitiva, próspera e incluyente.