La escasez de semiconductores, que desde hace meses ha golpeado severamente a la industria mexicana del automóvil, debería estabilizarse a lo largo de 2022 y alcanzar niveles prepandémicos en la segunda mitad del año, dijo la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).
México ha visto cómo la producción y venta de vehículos han estado perjudicadas durante meses por la escasez de chips, ligada a cambios de hábito de consumo y dificultades de transporte derivadas de la pandemia de coronavirus.
En una rueda de prensa, el director general de la AMIA, Fausto Cuevas, dijo que el gremio espera que el suministro puede irse estabilizando a lo largo del año.
Hacia el segundo semestre pudiera estar regresando a niveles que teníamos previos a la pandemia”, señaló.
Datos oficiales difundidos la semana pasada, mostraron que la producción y las exportaciones de automóviles de la segunda mayor economía de América Latina cayeron en enero con respecto al año anterior, la séptima caída mensual consecutiva.
La recuperación de niveles prepandémicos en el abasto de semiconductores permitiría al sector automotriz de México retomar cierta normalidad.
“Esto nos daría la posibilidad de reanudar o retomar niveles de ocupación de la capacidad instalada en porcentajes importantes”, agregó Cuevas.
La producción de vehículos cayó 2% en 2021 en comparación con 2020, la cuarta caída anual consecutiva, ya que la escasez de chips en los últimos meses llevó a los productores de automóviles en América del Norte a implementar cierres continuos, lo que redujo la producción.