Economía

Estos retos tendrá Julio Berdegué al frente de Agricultura y Desarrollo Rural

Julio Berdegué explicó para Punto de Refrencia, algunos de los temas cruciales en el sector agrario, como la decisión de Monsanto sobre el glifosato, la soberanía alimentaria y el plan hídrico nacional.

En una entrevista exclusiva para el noticiero Punto de Referencia, el Dr. Julio Berdegué, propuesto por la virtual presidenta electa Claudia Sheinbaum como próximo secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, abordó los desafíos en agricultura que tendrá la siguiente administración.

Monsanto y el glifosato

Berdegué comentó que es una noticia positiva que Monsanto haya desistido sobre el uso del glifosato. Desde el punto de vista de la presente política y del próximo Gobierno, hay una posición firme y clara sobre el tema.

“Respaldamos completamente la decisión que tomó el presidente Andrés Manuel López Obrador con el decreto de 2023, que estableció una fecha límite del 31 de marzo para suspender la importación de glifosato. Este decreto siempre estipuló que la suspensión dependía de la existencia de alternativas comerciales adecuadas en México” mencionó Berdegué.

Soberanía alimentaria

Al ser cuestionado sobre cómo se abordará la soberanía alimentaria en el contexto de cambio climático y escases de agua, Berdegué respondió: “La postura de la Dra. Claudia Sheinbaum respecto al maíz transgénico es clara: en México no se autorizará la siembra de maíz transgénico durante su Gobierno, al igual que en el actual”.

“La soberanía alimentaria no solo significa producir más, sino también mejorar las condiciones de vida de las personas que viven en el campo. Aunque hemos logrado avances en la reducción de la pobreza extrema en el campo durante el gobierno de López Obrador, aún tenemos más de 6 millones de compatriotas en condiciones de pobreza”, informó Julio Berdegué.

Plan hídrico nacional

Sobre el tema del agua, Berdegué afirmó que estamos en una crisis grave de agua, y aunque las lluvias recientes son positivas, no solucionan el problema de fondo. Sheinbaum ha planteado la formulación de un plan hídrico nacional, que ya se desarrolla de manera activa.

Este plan hídrico se basa en tres ejes:

1. Cambios legales y normativos: El agua no es una mercancía, es un derecho humano. Este principio debe quedar consagrado en la política del agua, junto con otros aspectos legales y normativos.

2. Fortalecimiento de la gobernanza del agua: Debemos mejorar cómo se toman las decisiones sobre el acceso, uso y tratamiento del agua, fortaleciendo la institucionalidad para abordar problemas como el huachicoleo del agua y los pozos ilegales, entre otros.

Soluciones prácticas: La agricultura utiliza 75.5% del agua concesionada en el país, y se desperdicia alrededor de 40-50%. Necesitamos cambios tecnológicos para usar el agua de manera más eficiente, permitiendo liberar agua para otros usos, principalmente el consumo humano y el desarrollo económico.

3. la importancia del tratamiento del agua: Debemos tratar el agua de manera adecuada para su reutilización, por ejemplo, en la agricultura. Este es un plan ambicioso, pero debe ir a la raíz del problema y ser implementado con mucho diálogo y búsqueda de acuerdos, ya que el tema del agua afecta a todos los mexicanos.

Berdegué concluyó enfatizando la importancia de la colaboración y el compromiso para enfrentar los desafíos en la agricultura, el desarrollo rural y la gestión del agua en México.

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