Los objetivos de erradicar el hambre y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en la agricultura no se alcanzarán en 2030 si ésta no “se vuelve más eficiente”, afirman en un informe la Agencia de la ONU para la Alimentación (FAO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
En un documento sobre perspectivas agrícolas estiman que la productividad agrícola mundial tendrá que aumentar 28% en la próxima década para eliminar la hambruna y reducir masivamente las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), según la trayectoria fijada por el Acuerdo de París sobre el clima.
“Sin embargo, la guerra en Ucrania ha hecho que los precios de la energía y de los insumos se disparen, y una subida prolongada aumentará los costes de producción y podría limitar el crecimiento en los próximos años”, advierten la FAO y la OCDE, lo que podría alterar sus previsiones.