La inflación en Estados Unidos volvió a aumentar en junio tras mantenerse estable en mayo. Los precios subieron 1.0% desde mayo y 6.8% desde junio de 2021, impulsados por la energía y los alimentos, según el índice de precios de gastos de consumo personal (PCE) y datos por el departamento de Comercio.
El gasto de los hogares, por su parte, aumentó con fuerza en junio, 1.1%, impulsado por la energía, la vivienda y la salud, mientras que el aumento de los ingresos de los hogares se mantuvo estable respecto a mayo (+0.6%).
Este disparó de 6.8% en junio, de acuerdo con medios internacionales, con respecto a un año atrás se considera el mayor aumento en cuatro décadas, que deja a las y los norteamericanos sin alivio ante el aumento de los precios.
Las cifras publicadas, dijeron, este viernes por el Departamento de Comercio subrayaron la persistencia de la inflación, que está erosionando el poder adquisitivo de las y los estadounidenses, debilitando su confianza en la economía y amenazando a los demócratas en el Congreso.
La tasa inflacionaria, agregaron, ha estado aumentando tan rápido, a pesar de los aumentos salariales que recibieron muchos trabajadores, por lo que la mayoría de las y los consumidores se están quedando atrás en relación con los gastos del costo de vida.
Ante este hecho, el presidente de EUA, Joe Biden publicó en sus redes sociales que “la Ley de Reducción de la Inflación de 2022 cumple una promesa que Washington ha estado haciendo durante décadas al pueblo estadounidense. Le estamos dando a Medicare el poder de negociar precios de medicamentos recetados más bajos”.
The Inflation Reduction Act of 2022 delivers on a promise that Washington has been making for decades to the American people.
— President Biden (@POTUS) July 28, 2022
We are giving Medicare the power to negotiate for lower prescription drug prices.