Las mujeres tienden a estar en promedio un 25% en condiciones de salud menos favorables que los hombres. De revertirse la situación, la economía podría tener una mejora de un billón de dólares anuales para 2040.
De acuerdo con un reporte elaborado por el Instituto de Salud McKinsey y el Foro Económico Mundial, cerrar esta brecha de género en la salud, además del impacto económico, podría agregar siete días saludables en la vida de cada mujer.
Además, identificó padecimientos específicos que configuran un tercio de los factores que abren esta brecha de salud entre mujeres y hombres.
Se trata de la cardiopatía isquémica, el cáncer cervical, el cáncer de mama, el desorden de hipertensión materna, hemorragia postparto, el síndrome premenstrual, la migraña, la endometriosis y la menopausia.
La investigación incluye la descripción de un mecanismo para medir y rastrear las brechas que generan estos nueve padecimientos en al menos 15 países, que se agudizan por distintas condiciones adicionales.
Esta información, subrayaron, puede contribuir al desarrollo de anteproyectos que, desde el sector público o privado, ayuden a las mujeres y niñas a vivir vidas más saludables y plenas que, además, deriven en economías más fortalecidas.