Una vez superado el confinamiento a nivel mundial y ante el aumento de la movilidad, la recuperación en la demanda de crudo llevó al petróleo intermedio de Texas (WTI, por sus siglas en inglés) a cotizar por arriba de los 70 dólares por barril, un nivel no visto desde octubre de 2018.
Dichos factores además de la reapertura de sectores estratégicos que estaban cerrados por la crisis sanitaria, señaló Marco Oviedo, economista en jefe de Barclays para América Latina.
Ayer, el WTI, el petróleo más vendido de Estados Unidos, concluyó la sesión en 70.29 dólares por barril.
En el caso de la Mezcla Mexicana de Exportación, el crudo que vende Pemex al exterior, el valor del hidrocarburo cerró el día en 66.73 dólares, lo que representó su máximo desde el 5 de noviembre de 2018.
Para México, este aumento es positivo porque se traducen en mayores ingresos petroleros, según Oviedo, pero al mismo tiempo eleva el costo de las gasolinas a nivel nacional.