De aprobarse la iniciativa en materia energética propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, tal y como está, sería un ‘descalabro’ para los mexicanos en el aspecto económico, advirtió Roberto Cosío, director general de DENER.
En entrevista con Once noticias, el experto destacó que, además de los mexicanos, las afectadas serían también las plantas hidroeléctricas y otras empresas que basan su labor en el mismo rubro.
Antecedente
Para entender mejor el tema, hay que tomar en cuenta que esta semana, se votará en la Cámara de Diputados, la Reforma Energética, por lo que, tanto el partido oficial y la oposición, se alistan para discutir una reforma, hasta el momento estancada. En esta ocasión, se pretende “sacar” adelante dicha iniciativa presidencial.
A esta labor, previamente se suma que el jueves pasado la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ya habría declarado como constitucional la Ley de la Industria Eléctrica (LIE), impulsada para fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Con esta medida, entrarán en vigor todas sus disposiciones, incluidas las que ordenan revocar contratos de generación para autoabastecimiento y permisos de compraventa de energía.
Es decir, se quedan todos los cambios que buscan fortalecer a la CFE: el cambio en el orden de despacho del sistema eléctrico nacional para privilegiar los contratos con compromiso de entrega física, y los cambios en el acceso a la red nacional de transmisión y a las redes generales de distribución.
Con ello, surtirán efectos los artículos transitorios de esa ley, que establecen que serán revocados los permisos de autoabastecimiento.
En ese sentido, Cosío hace un análisis de las repercusiones en materia económica que podrían comenzar a surtir efecto, en caso de aprobarse esta semana la Reforma Energética, tal y como la propuso el mandatario mexicano. Así mismo, remarca que la Corte no hizo constitucional la LIE.
“Mi primea consideración es que la SCJN no hizo constitucional la ley, lo que determinó es que la ley es de ‘aplicación general’; siete ministros de once, se opusieron a la misma; por lo tanto, abrieron la puerta para que, de manera individual, cada persona jurídica, moral o física que se sienta ofendida o violentada en varios derechos, pueda ampararse y, por supuesto, obtener la protección de la justicia, porque el amparo se gana por mayoría simple no por mayoría calificada”.
Esto significa, agrega Cosío, que muchas de las empresas y de las personas que fueron agraviadas o están siendo agraviadas por estos conceptos legales van a ser protegidos por la justicia.
De acuerdo con una valoración del especialista, enfocada a inversionistas americanos sino de plantas hidroeléctricas que están en condición vulnerable ante la LIE, el costo económico será de gran envergadura.
“Solamente en la parte relativa a los auto abastos, el costo es astronómico; se calcula como lucro cesante (daño patrimonial que consiste en la ganancia que se deja de obtener por un daño o un incumplimiento contractual), más o menos 190 mil millones de dólares (mdd)”.
Por tanto, sentencia: “para que tengan idea, esto es casi tres veces el Fobaproa, que aún estamos pagando; por eso, sería un descalabro brutal para el país) aprobarse la Reforma Energética tal y como está), no nada más en esta parte que es la económica, sino en la confiabilidad de la inversión y en el tema internacional”.
Cosío remarca que, ante tal panorama, nadie estaría interesado en hacer negocios con México porque, además, se vulneraría un tratado internacional, que tiene la misma jerarquía legal que la Constitución. Ello, añade, puede ser objeto de revocación o de que se expulse a México del T-MEC.
El directivo de DENER indica que tal es la gravedad de ese escenario que, hasta John Kerry, enviado presidencial especial de Estados Unidos para el Clima y Ken Salazar, embajador de EU en México, han expresado de manera urgente y contundente que no se apruebe la reforma tal como está, porque vulnera el Tratado y vulnera inversiones.
“Sí, me parece muy grave el detrimento a la relación y sí me parece muy grave la sordera del gobierno mexicano ante estos reclamos que son legales y no sólo de EU, sino de varios de nuestros socios comerciales como son España Alemania y Francia, sería importante que hubiera una reflexión y posibles cambios de opinión en cuanto a esto”.
¿Qué se espera esta semana en el Congreso?
En plena Semana Santa, se espera que en la Cámara baja se llegue a un acuerdo para sacar adelante la propuesta presidencial. Es ahí, donde el experto considera que el titular del Ejecutivo no se siente seguro de contar con los votos a su favor.
“Yo creo que el Presidente sabe que no tiene los votos necesarios para pasarla (la Reforma); se va a abrir a una posible negociación de los puntos álgidos, en los puntos violatorios de tratados, de leyes y de la Constitución. Si eso sucede, quizá para septiembre, para el siguiente proceso legislativo, exista la posibilidad de que pase una reforma que haga sentido y no contrasentido”, finaliza.