En Texas, Estados Unidos, más de 18 mil personas aún carecen de energía eléctrica, pero la población ahora enfrenta otro problema: los recibos de pago se elevaron exponencialmente, llegando en algunos casos a cerca de 5 mil dólares.
Por citar un ejemplo, una familia en Houston debe pagar dos mil 700 dólares sólo por los primeros 20 días de febrero, cuando en todo el mes de enero pagó 130 dólares.
Ante esto, el gobernador Greg Abbot, prohibió a las empresas que dan este servicio desconectar a sus clientes por falta de pago.
La Comisión de Servicios Públicos suspendió ahora mismo cualquier aumento adicional; está emitiendo una moratoria sobre las desconexiones de clientes por falta de pago y también van a restringir que los proveedores de electricidad envíen a los clientes las facturas que se dispararon en este momento’’, señaló Greg Abbot, gobernador de Texas.
En tanto, miles de personas realizan filas kilométricas, a pie y en automóvil, para recibir alimentos y agua potable.