Sri Lanka, atravesado por una gran crisis económica, anunció que no cumpliría con los pagos de su deuda externa por 51 mil millones de dólares, mientras espera un rescate del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El ministerio de Finanzas dijo que los acreedores, incluyendo los gobierno extranjeros que prestaron dinero a la isla ubicada al sur de India, podían capitalizar los pagos que debían recibir u optar por un reembolso en rupias esrilanquesas.
“El gobierno solo toma esta medida como último recurso, con el objetivo de evitar un nuevo deterioro de la situación financiera de la república”, indica el comunicado.
El ministerio agregó que la cesación de pagos inmediato de la deuda buscaba garantizar “un trato justo y equitativo de todos los acreedores” antes de la aplicación de un programa de recuperación con la ayuda del FMI.
Esta isla al sur de India, de 22 millones de habitantes, sufre graves falta de alimentos, combustible y otros productos esenciales, además de una inflación récord y apagones.
También ha sido escenario de manifestaciones antigubernamentales desde hace varias semanas.