Un tribunal de bancarrotas en Estados Unidos evaluará el plan de reorganización propuesto por el Grupo Aeroméxico, luego de que la aerolínea se acogió al Capítulo 11 de protección contra la bancarrota en Nueva York en junio de 2020.
Grupo Aeroméxico presentará a la jueza de la materia, Shelley Chapman, dicha propuesta, con lo que espera se podrían inyectar nuevos recursos a la compañía.
Por otro lado, Aeroméxico ha informado que cuenta con el apoyo de sus múltiples grupos de acreedores; sin embargo, también existe la versión de que el plan no debería aprobarse hasta que los acreedores minoritarios reciban mejores compensaciones.
La jueza de la materia Shelley Chapman ha reservado para varios días dicha audiencia, por lo que se prevé que no se pronuncie en breve sobre la propuesta. Si finalmente Chapman aprueba el acuerdo, Aeroméxico podrá salir de la bancarrota.
De acuerdo con la compañía, el plan reduciría su deuda en mil millones de dólares y salvaría unos 13 mil puestos de trabajo. Pero los acreedores menores argumentan que a costa de ellos es excesivamente beneficioso para los actuales accionistas, entre ellos Delta Air Lines Inc y cuatro miembros del consejo de administración.
Delta, que se prevé tenga alrededor de 20% de la compañía después de la reestructuración, ha dicho que la aprobación del plan es fundamental para mantener su relación a largo plazo con Aeroméxico.