La Unión Europea (UE) presentó este miércoles un paquete de “herramientas” para amortiguar el impacto social del alza en los precios de la energía, disparados a niveles que amenazan la recuperación económica pospandemia.
El conjunto de propuestas lanzado por la Comisión Europea a los países del bloque se propone enfrentar un cuadro en el que los precios del gas natural se han triplicado y se verifican fuertes aumentos en el carbón y derivados del petróleo.
La Comisaria Europea de Energía, Kadri Simson dijo que la preocupación de los consumidores es comprensible y justificada.
El invierno se aproxima y para muchos la factura de energía es la más elevada en una década”, señaló.
En el paquete de ideas que los Gobiernos pueden adoptar se incluyen pagos de emergencia, osiblemente en la forma de bonos para energía, a familias de bajos recursos, así como la posibilida de posponer el pago de las facturas de electricidad.
Los países de la UE también pueden ayudar a sus respectivas industrias a adaptarse a los altos costos de la energía siempre que ello no implique distorsionar la competencia o alterar el esquema de comercio de carbono en el bloque.
Estas propuestas a corto plazo están destinadas a ser temporarias y específicas”, indicó la Comisión Europea.
La UE también incitó a los estados a reducir impuestos y gravámenes sobre la electricidad.
Esto puede parecer una carga pesada para los estados, que apenas se están recuperando de la pandemia, pero pueden aprovechar los ingresos del mercado del carbono, donde los proveedores de energía compran derechos para contaminar”, indicó Kadri Simson.
En tanto, las propuestas para el medio plazo son más difusas y se concentran en inversiones en fuentes de energía renovables y redes paneuropeas, medidas que ya están en curso como parte de las metas del bloque en materia de reducción de emisiones para 2050.
Con relación a una sugerencia lanzada por España de realizar compras conjuntas de gas, como el bloque hizo con las vacunas contra el coronavirus, la Comisión apenas mencionó que deberían explorarse “los potenciales beneficios” de tal idea.
Además, Kadri Simson rechazó enérgicamente las críticas formuladas fundamentalmente por Hungría, de que el aumento del precio de la energía fue el resultado de costos más altos relacionados con esa transición verde.
No nos enfrentamos a un aumento del precio de la energía debido a nuestra política climática o porque la energía renovable sea cara. Lo estamos enfrentando porque los precios de los combustibles fósiles están subiendo”, puntualizó.
Por su parte, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen afirmó que la situación actual es resultado de nuestra dependencia de los combustibles fósiles.