La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, insistió en que se tiene que cumplir el objetivo de que a comienzos de 2021 llegue el dinero del plan de recuperación europeo, que se encuentra bloqueado por la negociación entre países.
Lagarde afirmó que “el objetivo de la Comisión es que se pueda pagar a comienzos de 2021 y debe cumplirse absolutamente”.
Hizo notar que “la pelota está en el campo de los Estados”, que deben presentar sus propios planes -algunos están ya listos-, que el Ejecutivo comunitario deberá someterlos a examen y que los parlamentos nacionales luego deberán adoptar los dispositivos.
Es crucial que este plan excepcional, que ha levantado importantes tabúes en ciertos países, sea un éxito”, subrayó.
Los riesgos son que no sea selectivo, que se pierda “en los dédalos administrativos” o que no llegue a la economía real para darle una orientación más digital y más verde.