En las elecciones del próximo 2 de junio, además de las elecciones presidenciales, se renovarán una Jefatura de Gobierno y ocho gubernaturas en el país, una de ellas es Puebla.
En entrevista para Contra Versus, de la Barra Digital de El Once, Mónica Camacho, periodista de La Jornada de Oriente, indicó que de cara a las próximas elecciones, uno de los temas que más preocupa en la entidad es la violencia.
Y es que la entidad ha vivido un escenario político complejo por una reciente renovación de titulares del Poder Ejecutivo.
“Hay una pugna muy fuerte entre los dos principales candidatos, Alejandro Armenta y Eduardo Rivera Pérez; es una pugna normal, pero lo que sí se ha notado distinto es el contexto en el que se lleva a cabo la elección, es un contexto de violencia e inseguridad que ha imperado en la zona metropolitana del estado y que se ha convertido en un tema de discusión durante las campañas (…) Esa es la diferencia que tiene este proceso electoral frente a los anteriores”, consideró la periodista.
Puebla busca ser gobernada por Alejandro Armenta Mier, candidato de la coalición “Sigamos Haciendo Historia” (Morena-PVEM-PT); Eduardo Rivera Pérez, de la alianza “Mejor rumbo para Puebla” (PAN-PRI-PRD-PSI); y Fernando Morales, de Movimiento Ciudadano, también se elegirán 26 diputaciones de mayoría relativa, 217 presidencias municipales, mil 818 regidurías, 15 diputaciones de representación proporcional y 217 sindicaturas de mayoría relativa.
A pregunta expresa sobre una posible participación de grupos delincuenciales en el proceso electoral en la entidad, la periodista de La Jornada de Oriente dejó en claro que es una situación que no se ha comprobado. Sin embargo, indicó que se han registrado hechos violentos, como el asesinato de un candidato de Morena a la alcaldía de Acatzingo.
“Están estos incidentes de violencia que están alcanzando al proceso electoral. No podemos decir que sea directamente la participación del crimen organizado, pero sí hay mucha preocupación, cada vez son más las solicitudes de los candidatos para tener protección especial por este clima de inseguridad”, explicó.
Respecto a la situación en la que llega Morena a esta elección, después del conflicto interno que generó la disputa de la candidatura a la gubernatura -entre Ignacio Mier y Alejandro Armenta-, Mónica Camacho indicó que, aunque fue un conflicto fuerte y ya quedó superado, la situación no avanzó hacia la unificación.
Indicó que ahora, quienes están inconformes son las bases del partido, ya que se aceptó en sus filas a una “ola de operadores del PRI”, que están siendo postulados a cargos de elección popular, mientras que los fundadores quedaron relegados.
“Se ha hablado de un movimiento que se está gestando en las bases, de voto dividido, diferenciado. Hay algunos fundadores de Morena que están hablando a favor de anular el voto para que quede registro de que hay inconformidad, que no están de acuerdo con la selección de candidatos, porque consideran que hubo imposiciones”, precisó.
Y respecto a una probable influencia de la Iglesia en el proceso electoral de Puebla, la periodista Mónica Camacho señaló que siempre ha buscado incidir y posicionar su agenda, que “hay influencia de la iglesia, pero no es una influencia activa”, finalizó.