Autoridades electorales de Estados Unidos dijeron en una declaración conjunta el jueves, más de una semana después de las elecciones presidenciales que “no hay evidencia” de votos perdidos o cambiados, ni de sistemas de votación alterados, con lo que se desestima la versión de un fraude.
Los funcionarios, responsables de la seguridad electoral en todo el país, rechazaron las afirmaciones hechas por el presidente Donald Trump y los republicanos de que su derrota ante el demócrata Joe Biden se debe a un fraude y a papeletas perdidas.
“La elección del 3 de noviembre fue la más segura en la historia de Estados Unidos”, dijeron en un comunicado.
“No hay evidencia de que algún sistema de votación haya eliminado o perdido votos, haya cambiado votos o haya sido alterado de alguna manera”, indicaron.
“Si bien sabemos que hay muchas afirmaciones infundadas e instancias de desinformación sobre nuestro proceso electoral, podemos asegurarles que tenemos la mayor confianza en la seguridad e integridad de los comicios, y ustedes también deberían tenerla”, añadieron.