Kamala Harris no se dirigirá a sus seguidores en esta noche electoral, anunció su equipo de campaña el miércoles, cuando Donald Trump se muestra cerca del triunfo en unas elecciones presidenciales de fuerte tensión.
“No escucharán a la vicepresidenta esta noche, sino mañana”, declaró Cedric Richmond, uno de sus jefes de campaña, a la multitud que se reunió para esperarla en la Universidad de Howard, en Washington.
Optimismo entre los seguidores de Trump en Florida
Las pantallas de la sala muestran a Donald Trump bailando al son de “YMCA”, de los Village People.
Y los seguidores del republicano, reunidos el martes en un centro de convenciones de Florida, se ríen a carcajadas y se relajan, cada vez más confiados en una victoria de su candidato a la presidencia de Estados Unidos.
“Siento que Trump ya ha ganado las elecciones. Esto ha terminado y creo que el mundo está a punto de ser mucho mejor”, dice uno de los presentes, Moses Abraham, de 22 años.
Como él, cientos de personas se han juntado en este lugar de West Palm Beach, donde se espera que el magnate republicano pronuncie un discurso en las primeras horas del miércoles.
El ambiente, tenso durante horas, ha cambiado. Los nervios y la incertidumbre del inicio de la noche han dado paso a un mayor optimismo, a medida que las cadenas de noticias CNN, FOX y MSNBC anunciaban los primeros resultados positivos para el republicano frente a Kamala Harris.
La multitud -donde se mezclan hombres en traje y corbata, mujeres con vestidos de gala y amantes de los chalecos de cuero- jalea las victorias de su candidato en estados como Texas, Florida, Carolina del Norte o Georgia.
“Esto es como en 2016”, dice Jo Ann Poly Calvo, de unos 50 años, recordando el año de las primeras presidenciales ganadas por Trump. “Siento que seguimos el mismo camino hacia la victoria. Estoy optimista sobre esta noche”.