Un tribunal de Los Ángeles inició un nuevo juicio contra el cómico Bill Cosby, acusado de agredir sexualmente a una joven de 16 años, Judy Huth, en la Mansión Playboy en el año 1974.
De acuerdo con el relato de la acusación, el cómico conoció a la joven mientras hacía deporte con una amiga durante el rodaje de “Let’s Do It Again” e invitó a ambas a una sala de juegos de la Mansión Playboy.
La amiga, Donna Samuelson, afirmó que, tras volver a encontrarse con Huth, ésta pidió salir inmediatamente.
“Me dijo que Bill Cosby había intentado tener sexo con ella”, explicó Samuels.
El abogado de Huth, Nathan Goldberg, dijo que Cosby aprovechó espacios que resultaban seguros a la joven, como un parque público y una sala de juegos para ganar su confianza.
En el juicio, que se celebra por una demanda interpuesta en 2014, no se espera la aparición de Cosby, quien el verano pasado se acogió a la Quinta Enmienda de la Constitución estadounidense que concede a cualquier individuo el derecho a no testificar si sus palabras pueden ser usadas para perjudicarlo, es decir, para autoincriminarse de un delito.
En 2018, el cómico fue sentenciado a prisión después de que un juez de Pensilvania lo encontrara culpable de un delito de abusos sexuales contra la canadiense Andrea Constand. Se convirtió en el primer famoso encarcelado en la era del #MeToo.
Más tarde, la Corte Suprema de ese estado revocó esa condena en junio por un acuerdo civil previo que invalida el juicio y por el que Cosby indemnizó a la víctima.
Tras su salida de la cárcel, el cómico ha expresado su intención de actuar y también pretende encabezar una campaña por la “reforma de la justicia” y el “sistema penitenciario” basada en sus propias experiencias.
Además del proceso abierto en California, Cosby tiene otro caso pendiente en Nueva Jersey, donde otra actriz le acusa de abuso sexual.