Espectáculos

Cantantes rancheros mexicanos que dejaron huella

Incredulidad, sorpresa, miedo, tribulación, llanto, así toma su lugar la muerte en el ánimo de una sociedad

Incredulidad, sorpresa, miedo, tribulación, llanto; así toma su lugar la muerte en el ánimo de una sociedad.

Lágrimas impotentes, lágrimas furiosas, lágrimas rencorosas ¿Por qué? ¿Por qué? Pregunta el dolor y la muerte no responde.

Toma la palabra el pueblo, grita y reta, que para morir nacimos, canta, desafía: “sigo siendo el rey”.

Condiciona: “que arrieros somos y en el camino andamos”.

Jorge Negrete

Ya ocurrió el 5 de diciembre de 1953. Jorge Negrete murió en el hospital Cedros de Líbano de Los Angeles, California.

Murió en Estados Unidos. el charro-cantor que como si lo presintiera le rogó a su México, lindo y querido, si muero lejos de ti, que digan que estoy dormido y que me traigan aquí.

Su gremio, el de la Época de Oro del Cine Mexicano, el que lo hizo su líder sindical, encabezó el impresionante duelo. multitudes fueron a llorar frente a su cadáver.

Pedro Infante

Un lunes de abril de 1957 pereció Pedro Infante. El avión que piloteaba falló. Cayó en Mérida, Yucatán. El carpintero de Guamúchil murió.

Lloraban las mujeres. sin su “Amorcito corazón” sin su Pepe “El Toro” y el luto cubrió al cine y a la canción ranchera. rijosa, resignada, resentida, seductora, descorazonada.

José Alfredo Jiménez impidió que los mariachis callaran y Lola Beltrán y la gran Lucha Villa revivieron a la muy entrona Lucha Reyes.

Javier Solís

Desde las “Sombras nada más” llegó Javier Solís y su bolero ranchero. La muerte, otra vez la muerte, siempre la muerte arranca notas tristes a los guitarrones y opaca los adornos del traje de charro.

Vicente Fernández

Del mero Jalisco, de la tierra del mariachi, surgió la poderosa garganta de Vicente Fernández., charro que duró mucho y cantó hasta que quiso.

Vicente Fernández murió en Guadalajara, en la capital de Jalisco que ya se sabe “Jalisco es muy lindo, palabra de honor”.

Otra vez la muerte se nos convierte en llorido.

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