El 75º Festival de Cannes espera con expectación el desembarco de uno de sus directores favoritos, Baz Luhrmann, con su película sobre Elvis Presley, y para entretener al público llamó a un telonero de lujo, el pianista Jerry Lee Lewis.
“Elvis” será presentada el miércoles. Es una producción de las que Luhrmann, autor de musicales como “Moulin Rouge” y de adaptaciones majestuosas de clásicos, como “Romeo y Julieta” o “El Gran Gatsby”, es especialista.
La nieta de Elvis, la directora Riley Keough, presente en Cannes, aseguró que vio el filme recientemente con su madre, Lisa Marie Presley, y su abuela, Priscilla Presley.
“Hay mucho trauma familiar y trauma generacional que empezó ahí. Verlo fue una experiencia muy intensa”, aseguró.
La película es interpretada por Austin Butler y el oscarizado Tom Hanks como mánager de Elvis, el coronel Tom Parker.
Un villano de serial
“El coronel Parker es un villano de serial. Un representante de artistas de la tradición antigua, un pícaro que entra en Estados Unidos sin visado desde Holanda. Empieza en el circo, en el vodevil o en los teatros de más baja estofa. Y acaba siendo el manager de Elvis”, explicó por vía telefónica Ignacio Julià, crítico musical y fundador de la revista española Ruta 66.
Jerry Lee Lewis siempre respetó la figura de Elvis, cuya música descubrió escuchando la radio de la camioneta de su padre.
Pero el coronel Parker lo tenía “enjaulado como un mono”, lanza el pianista en el documental que le dedica el cineasta Ethan Cohen, presentado en Cannes el domingo por la noche.
Jerry Lee Lewis (nacido en 1935) encarna el lado salvaje del rock blanco y sureño, con canciones como “Great Balls of fire” o “Whole lotta shakin’ going on”.
Cohen, otro de los realizadores fetiches de Cannes, le rinde homenaje con un documental clásico, a partir de sus actuaciones legendarias y sus declaraciones rimbombantes.