La Asociación Nacional de Actores (ANDA) es una agrupación de trabajadores formada por artistas de cine, teatro, radio, televisión, doblaje, stunt, centros nocturnos y demás ramas artísticas y del entretenimiento en México. Desde su creación en 1934 como un sindicato independiente, se ha preocupado por las condiciones laborales de los pertenecientes al gremio.
En 1944, la ANDA fundó “La Casa del Actor” en Mixcoac, en la alcaldía Benito Juárez. Sin embargo, para efectos de administrar los recursos del sindicato, “La Casa del Actor” es una Institución de Asistencia Privada o I.A.P., es decir, una persona moral con fines de interés público que con bienes de propiedad particular (en este caso el inmueble de la ANDA), ejecuta actos de asistencia social sin fines lucrativos.
Para comprender de manera integral el conflicto actual que tiene de La Casa del Actor “Mario Moreno” IAP, es importante conocer su propósito asistencial, es decir, con qué sentido se mantiene en pie y por qué hay tanta preocupación por el supuesto de su posible desaparición.
De esta forma, el objeto asistencial de “La Casa del Actor” es: proporcionar albergue, manutención, asistencia médica y farmacéutica a los actores del gremio.
Recientemente, se ha especulado sobre la desaparición de la institución por falta de recursos, complicaciones administrativas, conflictos legales, falta de donaciones, entre otras posibles razones.
El actor Jorge Ortíz de Pinedo, quien funge como vicepresidente del Patronato de “La Casa del Actor”, advirtió que a causa del adeudo millonario que tiene la ANDA con la Institución de Asistencia Privada, están a semanas de prescindir de decenas de empleados, entre los que se encuentra el personal de enfermería que atiende a la comunidad de casi 50 artistas que habitan en el predio.
Por otro lado, el Comité Ejecutivo Nacional ANDA, encabezado por el actor y comediante Jesús María Ochoa Domínguez, ha expresado mediante un comunicado publicado el día de ayer 8 de febrero, que nunca ha sido su intención deslindarse de su responsabilidad y obligación de brindar apoyo a los huéspedes de “La Casa del Actor”.
La suspensión de los pagos correspondientes a la manutención de dicha institución se debe únicamente al conflicto legal, que iniciará el actual Patronato de “La Casa del Actor” en contra de la ANDA y lamentablemente persistirá hasta que la autoridad lo determine”, se lee en el comunicado.
Asimismo, el documento señala que la ANDA ofreció pagar $400 mil pesos mensuales a “La Casa del Actor” durante el transcurso del proceso legal, propuesta que ha sido rechazada en varias ocasiones por los representantes de “La Casa del Actor”: Mario Eduardo Moreno Laparade, Jorge Ortíz de Pinedo y Javier Coello Trejo.
En respuesta a la legítima preocupación de nuestra Comunidad ANDA, sociedad civil y medios de comunicación, compartimos las siguientes aclaraciones con respecto a la ANDA y La Casa del Actor. @TvsEspectaculos @ANDATuASaber @proceso @columba_vertiz @ImagenTVMex @rossmurrieta pic.twitter.com/PT6YGcnHyM
— Asociación Nacional de Actores (@andactores) February 8, 2021
Por su parte, el actor Jorge Ortíz de Pinedo realiza mediante redes sociales la campaña “Actuemos por los que actuaron”, donde mediante cortos videos invita a las instituciones, compañeros del gremio y público en general, a realizar donativos que permitan continuar en pie a “La Casa del Actor”. Entre las personalidades que apoyan la iniciativa se encuentran Adal Ramones, Irán Castillo, María Fernanda García, Sergio Corona, Laura Luz, Rubén Cerda, Mauricio Herrera y Moisés Iván Mora, entre otras figuras del espectáculo.
La Casa del Actor se encuentra en riesgo de cerrar sus puertas, ante esta emergencia, nos vemos obligados a pedir ayuda, necesitamos urgentemente recursos para subsistir.
— JORGE ORTIZDEPINEDO (@JORGEODEPINEDO) February 5, 2021
“ACTUEMOS POR LOS QUE ACTUARON”
Tu donativo es deducible de impuestos. pic.twitter.com/luLdoLWL6Y
Mientras la ANDA continúa pidiendo transparencia en la administración de los recursos para el mantenimiento de “La Casa del Actor”, la pandemia es un factor importante que ralentiza cualquier proceso legal y el destino final de la institución es aún incierto.