Al menos 10 personas murieron y otras cinco resultaron heridas cuando un autobús de pasajeros detonó una mina terrestre en el este de Burkina Faso el día de Navidad, dijo el gobierno en un comunicado.
“En la tarde del 25 de diciembre de 2022, un minibús de transporte en común chocó con una mina en la carretera Fada N’Gourma – Kantchari, en el pueblo de Bougui. Desgraciadamente la explosión causó la muerte de diez pasajeros y causó cinco heridos”, según el comunicado del coronel Hubert Yameogo.
El autobús viajaba desde la ciudad comercial de Fada N’Gourma, a unos 220 km (136 millas) de la capital, Uagadugú, hasta la ciudad fronteriza de Kantchari, cerca del vecino Níger.
Nadie se ha atribuido la responsabilidad, pero el ataque ocurrió en un área donde el gobierno lucha contra insurgentes vinculados a Al Qaeda en el norte de África y combatientes del Estado Islámico.
Los insurgentes controlan franjas de territorio en Burkina Faso. Desde 2015 han llevado a cabo redadas y bloqueos en varias localidades de las regiones norte y este del país, matando a más de 2 mil personas y desplazando a casi 2 millones.
“El bus salió de Matiakoali hacia Fada N’Gourma. Las víctimas son principalmente mujeres y niños”, indicó por su lado un habitante.
El sábado, dos soldados de una unidad de patrullaje murieron a causa de un objeto explosivo en la carretera Ouahigouya – Gomboro, en el norte del páis, según una fuente de seguridad.
Desde 2015, Burkina Faso es afectado por ataques yihadistas que causaron miles de muertos y obligaron a unas dos millones de personas a huir de sus hogares.
Estos ataques de grupos relacionados con el Estado islámico y Al-Qaida han aumentado en los últimos meses.