El alcalde de Mariúpol, Vadym Boichenko, informó este jueves que aproximadamente 100 mil personas permanecen en la ciudad, por lo pidió al Gobierno ruso un alto el fuego para permitir que los civiles que permanecen en la planta Azovstral abandonen el lugar.
Además, Boichenko confirmó que cuatro autobuses con civiles partieron de la ciudad y se dirigen a Zaporizhzhia, mientras que de 300 a mil personas continúan en la planta Azovstal. La cantidad no es exacta porque es desconocida debido a que está rodeada por tropas rusas.
Actualmente, otros tres autobuses de evacuación llegaron a Zaporiyia. Mujeres y niños viajaban dentro de éstos conducidos a través de un corredor humanitario de evacuación.
Este jueves, el presidente ruso, Vladimir Putin, anunció que Mariúpol estaba bajo control ruso. Los últimos resistentes ucranianos, combatientes del batallón nacionalista Azov y de la 36 brigada de infantería naval están atrincherados en el gigantesco complejo metalúrgico de Azovstal, junto a varios cientos de civiles.
El Ministerio de Exteriores de Ucrania pidió un corredor humanitario de emergencia para evacuar a los civiles, ya que Vladimir Putin ordenó sitiar Azovstal en lugar de atacar.