Alemania autorizó, a partir de este lunes, el consumo recreativo del cannabis, pese a la oposición de diferentes grupos conservadores y asociaciones médicas que temen que esta decisión genere consecuencias negativas entre la juventud.
Ahora, la ley estipula que los adultos de más de 18 años podrán llevar consigo 25 gramos de marihuana en la vía pública, cultivar hasta 50 gramos y tener hasta tres plantas por adulto en su domicilio.
Esta reforma coloca a Alemania entre los países más permisivos con el tema del cannabis en Europa, junto a Malta y Luxemburgo, los cuales legalizaron el consumo recreativo en 2021 y 2023, respectivamente.
Aunque esta madrugada, unas mil 500 personas se reunieron en la emblemática Puerta de Brandemburgo para fumar y celebrar la legalización del uso recreativo de la marihuana, hay que aclarar que, aunque la ley entra en vigor este 1 de abril de 2024, los consumidores deberán esperar tres meses para comprar marihuana de manera legal en los llamados “clubes sociales de cannabis”, por lo que su adquisición antes de julio seguirá siendo ilícita.
De acuerdo con la ley, los clubes de cannabis solo podrán tener un máximo de 500 miembros y distribuir 50 gramos mensuales a cada afiliado.
Una reforma polémica
El canciller alemán socialdemócrata, Olaf Scholz, ha señalado que la legalización del cannabis ayudará en la lucha contra el tráfico de drogas. Por su parte, el ministro de Salud, Karl Lauterbach, también celebró la decisión, al señalar que el tema deja de ser tabú.
El Gobierno alemán también ha prometido emprender una campaña sobre los riesgos por el consumo de cannabis, además recordó que sigue prohibido entre menores de 18 años y que tampoco se puede consumir a menos de 100 metros de escuelas, guarderías y zonas de juego para niños.
Por otra parte, organizaciones de salud advirtieron que la legalización puede provocar un aumento del consumo entre los jóvenes, el cual podría afectar el desarrollo de su sistema nervioso central y derivar en problemas psiquiátricos.
Algunos elementos policiacos han criticado también la nueva legislación, pues temen que sea difícil asegurar el cumplimiento de esta ley. Además, se establece una amnistía retroactiva para delitos relacionados con el cannabis, lo que puede generar retrasos importantes en los procedimientos administrativos del sistema jurídico.