El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, fue reelecto este sábado en unas elecciones generales marcadas por la incertidumbre global y la preocupación ciudadana ante las políticas del presidente estadounidense Donald Trump, especialmente su guerra arancelaria.
El líder laborista logró una dramática remontada frente a la coalición conservadora Liberal-Nacional liderada por Peter Dutton.
Aunque el conteo final de votos aún está en proceso, las proyecciones oficiales ya lo dan como ganador con mayoría suficiente, consolidando así su segundo mandato consecutivo al frente del país.
Una victoria por los valores australianos
Durante un discurso en Marrickville, un suburbio al oeste de Sídney, Albanese agradeció a los votantes por renovar su confianza en un proyecto que defiende “la justicia, la aspiración y las oportunidades para todos”.
“En estos tiempos de incertidumbre global, los australianos han optado por el optimismo y la determinación”, afirmó el líder laborista, de 62 años. “Han optado por afrontar los desafíos globales a la manera australiana: cuidándose unos a otros mientras construimos el futuro”.
Thank you, Australia. pic.twitter.com/GTjL6QwPzV
— Anthony Albanese (@AlboMP) May 3, 2025
El líder opositor Peter Dutton, quien perdió el escaño que ocupaba desde 2001, reconoció su derrota públicamente y declaró que llamó a Albanese para felicitarlo por su victoria.
La reelección de Albanese fue bien recibida por varios líderes internacionales. El primer ministro británico Keir Starmer y el secretario de Estado estadounidense Marco Rubio expresaron su intención de profundizar las relaciones bilaterales con Australia, especialmente en comercio, seguridad y cambio climático.
A nivel interno, Albanese prometió priorizar la crisis de vivienda, incrementar la inversión en el sistema de salud y enfrentar los retos económicos derivados del contexto internacional.