Al menos 44 personas han perdido la vida y se reportan 56 desaparecidos debido a las intensas lluvias que desde hace casi una semana mantienen en alerta el estado de Pernambuco, en el noreste de Brasil.
El ministro de Desarrollo Regional, Daniel Ferreira, informó que 25 heridos han sido atendidos, mientras casi 4 mil personas perdieron su hogar y más de 500 lugareños tuvieron que ser evacuados por las intensas corrientes.
La mayoría de las víctimas mortales quedaron sepultadas durante deslizamientos de tierra ocurridos el sábado en la región metropolitana de Recife, la más afectada por el temporal que causa estragos en varios estados del noreste del país.
“Aunque ahora ha dejado de llover, tenemos previsión de fuertes lluvias para los próximos días. Así que lo primero es mantener las medidas de autoprotección”, declaró el ministro, quien sobrevoló la zona afectada acompañado por los titulares de las carteras de Salud, Turismo y Ciudadanía.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, informó este domingo por la mañana que el lunes se desplazará a Recife para seguir de cerca la “tragedia”.