
La comisión de la Cámara de Representantes del Congreso de EUA, que investiga el asalto al Capitolio de 2021, celebró este lunes una nueva sesión con la comparecencia de asesores de la campaña electoral del expresidente Donald Trump, quienes revelaron que advirtieron al mandatario que no se precipitara con las acusaciones de fraude electoral.
Un grupo de diputados -siete demócratas y dos republicanos- investiga desde hace casi un año si Trump tiene alguna responsabilidad en el asalto al Capitolio por parte de sus simpatizantes, que intentaron impedir que certificara la victoria de Joe Biden, porque estaban convencidos de que hubo fraude presidencial en 2020.
El exjefe de campaña de Trump, Bill Stepien, describió que, en la noche de las elecciones, el expresidente no estuvo de acuerdo con su opinión, ya que lo instaba a la prudencia, y le dijo que era demasiado pronto para determinar el ganador de las elecciones.
“Esto es un fraude al público estadounidense. Esto es una vergüenza para nuestro país. Nos estábamos preparando para ganar esta elección, francamente ganamos esta elección”, dijo Trump en aquel momento, según narró Stepien en uno de los primeros testimonios de la audencia.
Por su parte, el exfiscal general Bill Barr dijo al comité que Trump afirmó que se trataba de un fraude antes de que existiera la posibilidad de examinar las pruebas, pese a que sus asesores le advirtieron y dijeron que había que esperar un poco más.
Sin embargo, sí que siguió los consejos de Rudy Giuliani y otras figuras cercanas a él que hablaban sobre fraude electoral, pese a que el exalcalde de Nueva York estaba “aparentemente ebrio” cuando asesoraba a Trump.
Jason Miller, exasesor principal de la campaña de Trump, indicó que, efectivamente, Giuliani estaba “definitivamente intoxicado” en la fiesta de la noche de las elecciones en la Casa Blanca, unas declaraciones con las que ha coincidido también la vicepresidenta del comité, Liz Cheney.
Stepien testificó que unas dos semanas después de su derrota en 2020, Trump apartó a su principal asesor de campaña, Justin Clark, y se acercó a Giuliani, un movimiento por parte del expresidente que ocasionó incomodidad también a Barr, quien consideró que estas afirmaciones de supuesto fraude eran “tontas” y “erróneas”.
Los asesores de campaña aseguraron ante el comité que todos le dijeron a Trump que no declarara la victoria la noche de las elecciones, pero el expresidente compareció en rueda de prensa en la Casa Blanca para declararse el ganador de las elecciones.
Ben Ginsburg, un abogado electoral republicano, agregó que el expresidente estadounidense tuvo su oportunidad de impugnar los resultados de las elecciones; sin embargo, no tuvo “evidencia real” de fraude.
El Comité Selecto de la Cámara de Representantes liderado por los demócratas, presentó sus hallazgos en la segunda de las seis audiencias esperadas este mes en su investigación de casi un año sobre los disturbios.
La audiencia de este lunes buscó demostrar que Trump ignoró los consejos de muchos de sus propios empleados cuando afirmó que le habían “robado” las elecciones presidenciales de 2020:
“Él y sus asesores más cercanos sabían que esas afirmaciones eran falsas, pero continuaron vendiéndolas de todos modos, justo hasta los momentos antes de que una turba de partidarios de Trump atacara el Capitolio”.
Los demócratas dijeron que Trump recaudó unos 250 millones de dólares de sus partidarios para presentar denuncias de fraude en los tribunales, pero en cambio desvió gran parte del dinero a otros lugares.