Seis personas -entre ellas cuatro niños- resultaron heridas este sábado durante el ataque a un centro de vacunación antipolio del norte de la Franja de Gaza, informó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“El centro de atención primaria Sheij Raduán, en el norte de Gaza, fue atacado hoy mientras los padres llevaban a sus hijos a vacunarse contra la polio, en una zona donde se había acordado una pausa humanitaria para permitir la vacunación”, escribió en la red social X el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Tedros no precisó en su comunicado el tipo de ataque ni su procedencia.
Un miembro de la Defensa Civil de Gaza afirmó por su parte que al menos tres personas habían resultado heridas por los fragmentos de un misil disparado por un dron israelí contra un muro de la clínica, situada al oeste de Ciudad de Gaza.
Contactado por la AFP, el ejército israelí desmintió haber disparado contra el centro de vacunación.
“Un primer examen de las acusaciones ha determinado que el ejército no llevó a cabo un ataque contra esta zona en el momento señalado”, declaró esa fuerza en un comunicado, en el que precisa que participó en la coordinación de la campaña de vacunación.
Esta estrategia de inmunización contra la poliomielitis se reanudó este sábado en el norte de Gaza, una zona confrontada desde hace semanas a una intensificación de las operaciones militares israelíes contra el movimiento islamista Hamás.
La OMS y la agencia de la ONU para la infancia (Unicef) habían recibido garantías de que los padres podían llevar en condiciones seguras a sus hijos a recibir la segunda dosis.
Según la OMS, unos 119 mil niños del norte del territorio palestino esperan su segunda dosis de la vacuna oral contra la polio, una enfermedad que puede dejar graves secuelas.
“Este ataque, durante una pausa humanitaria, pone en peligro la inviolabilidad de la protección sanitaria de los niños y puede disuadir a los padres de llevar a sus hijos a vacunarse”, escribió el director de la OMS.
“Estas pausas humanitarias vitales deben ser absolutamente respetadas. ¡Alto el fuego!”, agregó.