Ubicada al norte de la India, Cachemira es una región disputada con Pakistán, donde la noche del viernes ambas naciones intercambiaron disparos, según fuentes oficiales.
El conflicto ha ido en incremento después del atentado en el que hombres armados asesinaron a 26 turistas el martes. Fue ése el punto en el que las relaciones entre los dos países tocaron fondo.
Para ello, la mañana de este viernes, Syed Ashfaq Gilani, funcionario del gobierno de la Cachemira administrada por Pakistán, aclaró que las tropas habían intercambiado disparos a lo largo de la línea de control que separa a ambos países. Sólo aclaró que “no hubo disparos contra la población”
Por su parte, el ejército de la India acusa a Pakistán de haber iniciado los disparos. Añadió que “habían sido respondidos eficazmente”.
Llamado a la paz
El mismo jueves, Stéphane Dujarric, portavoz de la ONU, hizo declaraciones a la prensa de Estados Unidos estableciendo que los problemas entre ambos países “pueden y deben resolverse pacíficamente mediante un compromiso mutuo significativo”.
En ese sentido, hizo un llamado a que Pakistán y la India “actúen con la máxima moderación y se aseguren de que la situación y los acontecimientos que hemos visto no se deterioren aún más”.
Los compromisos
Narendra Modi, primer ministro de la India, prometió detener a los responsables de la matanza de los 26 civiles en Pahalgam. Aseguró que la policía encontró a dos de los tres sospechosos fugitivos como paquistaníes.
El gobierno de Islamabad, capital de Pakistán, calificó de “frívolos” los intentos de vincularles con el ataque en Pahalgam y prometió responder a cualquier acción india.
Cachemira es un territorio controlado por la India. Desde 1989, grupos rebeldes han llevado a cabo una insurgencia en la región. Exigen la independencia o la fusión con Pakistán. Expertos aseguran que una respuesta militar todavía puede estar en proyecto.